Lo que escribimos es lo único que quedará de nosotros.

martes, 13 de agosto de 2013

Cartas a...

V

He encontrado por casualidad (y un poco por intención), el álbum de fotos de la boda de mis padres. No es ninguna obra maestra de la fotografía, y la ceremonia en sí no fue un acontecimiento de dimensiones desproporcionadas, pero verlos sonriendo, besándose... Me hace plantearme preguntas. Como por ejemplo, por qué el Mundo es así, ¿por qué yo no pude disfrutar de ellos? ¿Por qué acabó tan pronto? Y sobre todo... ¿Por qué tengo que quererlos por turnos? Ya sabes lo mucho que te envidio...
Puede que si mi vida hubiera sido una más del montón, mi historia se amontonaría como tantas otras. Puede que yo hubiera sido una apática, que vive porque se supone que es lo que hay que hacer, y no por el mero placer que produce respirar, o sentir un corazón latiendo. Puede que todo tenga una razón, quién sabe... Pero mientas tanto, no puedo evitar devanarme los sesos y lanzarle al silencio mil "por qués" que no obtienen respuesta. Es frustrante.

13 de Agosto, bien entrada la madrugada. Espero que no me pase como ayer; había un enjambre de inquietudes revoloteando sobre la cabecera de mi cama, y justo cuando el tímido Morfeo se aventuraba a darme su beso del Sueño, las malditas lo espantaban y yo, desesperaba retorciéndome en nudos imposibles entre las sábanas... Me resigné a soñar despierta hasta el amanecer, cuando por fin, las inquietudes se quedaron profundamente dormidas sobre la almohada.

Creo que soy un poco egoísta... Yo siempre contándote cosas, desahogándome, y tú... ¿Tú qué? ¿Conseguiste a la princesa?
Nunca Jamás sin Peter es como respirar sin pulmones... Olvidé volar, y Campanilla se fue, cansada de mí. Aquí sólo quedamos los piratas y yo... Hasta los niños perdidos crecieron.
Hazlo por las sonrisas caídas; consigue una barca para remontar el Dwat. Ya, ya sé que el Rey de Badar es estricto con la normativa de los forasteros, no quiero crearte problemas con él. Entonces... Al menos, enciende la llama de la esperanza de nuevo, que con tanta lágrima, a veces se apaga.

No hay comentarios:

Publicar un comentario